¡OH, ALDEHUELA DE BELÉN!

¡Oh, aldehuela de Belén!
Afortunada tú,
Pues en tus campos
Brilla hoy la sempiterna luz.
El hijo, el Deseado,
Con santa expectación
Por toda gente y toda edad
En ti, Belén, nació.
 
Allá do el Redentor nació,
Los ángeles están
Velando todos con amor
Al niño sin igual.
¡Estrellas rutilantes,
A Dios la gloria dad!
Pues hoy el Cielo nos mostró
De buena voluntad.
 
¡Cuán silencioso allí bajó,
Preciado y puro don!
Así también aquí dará
Sus bendiciones Dios.
Ningún oído acaso
Perciba Su venir,
Mas el de humilde corazón
Se habrá de recibir.
 
¡Oh santo Niño de Belén!
Desciende con Tu amor,
Y echando fuera todo mal
Nace en nosotros hoy.
Angélicos cantores
Le anuncian al nacer.
Ven con nosotros a morar,
Jesús, Emanuel.
PHILLIPS BROOKS, 1868

Escrito por un pastor joven que, en la noche de Navidad de 1865, estando en los cerros de Israel, donde se dice que los ángeles dieron la noticia a los pastores, se sintió inspirado a escribirlo para los niños de su congregación.

La música la compuso el organista de la iglesia, llegando a ser uno de los grandes favoritos de Navidad.