JESÚS, YO HE PROMETIDO

Jesús, yo he prometido

Servirte con amor;

Concédeme tu gracia

Mi amigo y Salvador;

No temeré la lucha

Si tú a mi lado estás,

No perderé el camino

Si tú guiando vas.

 

El mundo está muy cerca,

Y abunda tentación;

Suave es el engaño

Y es necia la pasión:

Sé tú, Jesús, más cerca

Mostrando tu piedad,

Y escuda al alma mía

De toda iniquidad.

 

Cuando mi mente vague

Ya incierta, ya veloz,

Concédeme que escuche

Jesús, tu clara voz;

Anímame, si paro;

Si corro, me detén;

Repréndeme, si temo

En todo hacer el bien.

 

Jesús, tú has prometido

Al que en pos de ti va

Que do tú estás en gloria,

Tu sierva allí estará;

Sostenme en el camino

Y al fin con dulce amor

Trasládame a tu gloria,

Mi amigo y Salvador.

H-525   Sonido: (((·)))

JOHN ERNEST BODE, 1816-1874

Algunos escritores de himnos son conocidos sólo por uno. Puede que hayan escrito otros, pero sólo uno ha ganado la prominencia y permanencia. Es el caso de Juan Bode, que escribió muchos himnos buenos, pero normalmente nadie sabría citar más que éste.

Fue escrito para la ocasión en que tres de sus hijos, dos chicos y una chica, iban a ser confirmados en Castle Camps, Cambridge. El propósito era impresionar sus mentes con la solemnidad del paso que daban aquel día. Desde entonces siempre se ha asociado con confirmaciones y primeras comuniones. Pocos cultos de ese tipo se llevan a cabo sin que sea cantado, despertando el recuerdo de votos hechos anteriormente.

Juan Ernesto Bode, el hijo del Sr. Guillermo Boce de la Central de Correos, nació en 1816, y fue educado en Eton y Christchurch, Oxford. A su tiempo fue ordenado y ejerció como Rector de Westwell, Oxon, en 1846; después en Castel Camos, Cambridge, en 1860, donde permaneció hasta su muerte. También por un tiempo fue Tutor en Christchurch y Examinador de Clásico.

Este himno apareció en principio en forma de folleto (Nº 1468) editado por la Sociedad para la Promoción del Conocimiento Cristiano en 1868, como un himno para las nuevos confirmados. Entonces tenía 6 estrofas.

Sólo Dios sabe los muchos votos y promesas que han sido hechos a Cristo durante el canto de este himno, pero cuando los secretos de todos los corazones sean revelados constituirá una maravillosa historia. Sin duda el autor pensó que su himno sería solo para el beneficio de su familia, pero escribió mejor de lo que pensaba.