HAY UN PRECIOSO MANANTIAL

Hay un precioso manantial

De sangre de Emmanuel,

Que purifica a cada cual

Que se sumerge en él. ///

Que purifica a cada cual

Que se sumerge en él.

 

El malhechor se convirtió

Pendiente de una cruz;

El vio la fuente y se lavó,

Creyendo en Jesús. ///

El vio la fuente y se lavó,

Creyendo en Jesús.

 

Y yo también mi pobre ser

Allí logré lavar;

La gloria de su gran poder

Me gozo en ensalzar. ///

La gloria de su gran poder

Me gozo en ensalzar.

 

¡Eterna fuente carmesí!

¡Raudal de puro amor!

Se lavará por siempre en ti

El pueblo del Señor. ///

Se lavará por siempre en ti

El pueblo del Señor.

Sonido: (((·)))

WILLIAM COWPER (1731-1800), 1772

Amigo y colaborador del famoso John Newton. Nació en Inglaterra. Su padre era capellán del rey Jorge II y su madre era de la familia real. A pesar de ello, no fue un joven feliz. A los seis años de edad su delicada salud empeoró con motivo de la muerte de su madre. Su padre le obligó a estudiar derecho, pero ante los exámenes finales sufrió una crisis nerviosa.

En varias ocasiones intentó suicidarse, tomando una sobredosis de droga, pretendiendo tirarse de un puente o echándose sobre un cuchillo. En un último intento procuró ahorcarse, pero lo rescataron a tiempo y fue internado en un sanatorio, donde descubrió, en Romanos capítulo 3: "siendo justificados gratuitamente por su gracia mediante la redención... que es en Cristo Jesús... por medio de la fe en su sangre". Entendió la muerte de Cristo por él y pidió el perdón de sus pecados.

Fue uno de los mejores poetas de su época, escribiendo varios himnos conocidos.