¿TE SIENTES CASI RESUELTO YA?

¿Te sientes casi resuelto ya?

¿Te falta poco para creer?

Pues, ¿por qué dices a Jesucristo:

"Hoy no, mañana te seguiré"?

 

¿Te sientes casi resuelto ya?

Pues vence el casi, con Cristo ven,

Que hoy es tiempo, pero mañana

Sobrado tarde pudiera ser.

 

Sabe que el casi no es de valor

En la presencia del justo Juez:

¡Ay del que muere casi creyendo!

¡Completamente perdido es!

H-136    Sonido: (((·)))




P. P. BLISS

Bliss era poeta y músico, y prácticamente a todos sus himnos les puso él la música. Enseguida se hacían populares, y con la llegada de la gran misión de Moody y Sankey, de continente en continente, los colocaban en el corazón y el hogar.

Cuando tenía 30 años, le sucedió algo que sería recordado como uno de los eventos más importantes en su vida: su encuentro don D. L. Moody, que entonces tenía cultos Evangelísticos en Chicago. Dotado de una dulce voz grave y de tono espléndido y calidad, el poderoso canto del Sr. Bliss enseguida atrajo la atención del evangelista, con resultados de gran trascendencia, e hizo época en un movimiento que ha sido de los más bendecidos y notables en los últimos tiempos.

Fue un escritor prolífico. Sus himnos respiran el espíritu de devoción. Para él la “Venida del Señor” era realmente una verdad Escritural, tan real y vívida que su vida era inspirada por ella en todo lo que decía o hacía.

A menudo iba a su esposa con el tema de un himno, con el rostro radiante y sus ojos húmedos con lágrimas, y le pedía que orara para que Dios bendijera el himno.

De este evangelista cantante, D. L. Moody escribió: “Como escritor y cantante de canciones del Evangelio era, según lo estimo, el más honrado por Dios de todos los hombres de su época; y con todos sus dones, era el hombre más humilde que he conocido.”

Felipe Pablo Bliss fue llamado al Hogar el 29 de diciembre de 1876. Con su esposa viajaba hacia Chicago, cuando en Ashtabula, Ohio, se derrumbó el puente del ferrocarril y el tren se precipitó al río. El Sr. Bliss pudo haber escapado, pero procurando rescatar a su esposa del vagón que ardía, perdió su vida. Tenía entonces 38 años.


Otros himnos del mismo autor, con más información:
"¡Camaradas! en los cielos"
"Gozo la Santa Palabra leer"
"La merced de nuestro Padre"
"Levantado fue Jesús"
"¡Oh! cantádmelas otra vez"
"Yo cantaré de mi Jesucristo"

Compuso la música de:
"De paz inundada"
"Mi vida di por ti"
"Muy cercano está el día"